Algunos todavía caminan entre nosotros, el resto partió. Despiertan curiosidad, risas y nostalgia en la misma proporción con el simple hecho de nombrarlos. En ciertos casos, no existe siquiera apellido que los identifique. Su apodo completa el casillero.
En una carrera contra el paso del tiempo propongo dar con las historias de aquellas celebridades que aunque difícilmente obtengan del municipio la llave del pueblo merecen ser recordadas. Para que vivan siempre en nuestra memoria. Para que no mueran nunca.
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| Foto: Juan Cabezas |
Es un honor para mí abrir este muro de comentarios. Me gusta eso de ser la madrina de tu profesión (aunque debo confesar que me hace sentir un poco viejita).
ResponderEliminarVillegas es una necesidad de la memoria. Un ejercicio del recuerdo. Quizá por eso sentimos la necesidad de volver, siempre. Aunque a veces no encontremos lo que nuestro corazón conserva.
Olores, colores, formas, personajes, anécdotas. Eso somos. Eso es Villegas. Lo que somos.
Te felicito y me siento muy orgullosa de mi pollo. Has crecido mucho, y vas a crecer mucho más. El día que escribas tu primer libro, espero poder redactar el prólogo.
Grande Rama!!, grandes personajes y grandes historias para contar, que merecen ser contadas.
ResponderEliminarÉxitos con esto y con lo que va a generar...a difundir amigos!!.